Los funcionarios podrán alargar voluntariamente su vida laboral hasta los 72 años, dos más que en la actualidad. Esta ampliación propuesta por el PSOE como enmienda al proyecto de ley de la función pública será abordada en próximas reuniones de la ponencia creada, dentro de la Comisión de Hacienda y Función Pública, este martes en el Congreso.
La enmienda socialista recuerda que la jubilación forzosa de los funcionarios se declarará de oficio al cumplir la edad legalmente establecida, que son 67 años o 65 años si se tienen 38,5 años cotizados, salvo para el personal aún incluido en el régimen de clases pasivas que la tienen fijada en 65 años.
No obstante, se puede solicitar, con una antelación mínima de tres meses y máxima de cuatro meses a la fecha en la que cumpla la edad de jubilación forzosa, la prolongación de la permanencia en la situación de servicio activo por periodos de un año, prorrogables hasta los 72 años.
Para otorgar dichas prórrogas, la enmienda socialista propone tener en cuenta razones organizativas o funcionales, el desempeño de la persona, su rendimiento o resultados, su capacidad psicofísica y su absentismo durante el año anterior.
Por último, otra de las enmiendas socialistas recupera la jubilación parcial anticipada en las Administraciones Públicas.
Así establece que el personal funcionario que haya cumplido la edad de jubilación (67 ó 65 si se acreditan 38 años y seis meses de cotización) podrá acceder a esta modalidad con una reducción entre el 25% y el 75% de su jornada de trabajo y sin necesidad de sustitución del funcionario jubilado parcial.