El juzgado de lo Mercantil 1 de Pontevedra ha declarado que los créditos que seis entidades mantienen frente a Pescanova tienen la condición de concursales no recurrentes, lo que obliga a aplicarles una quita del 97,5% y a diferir su pago hasta que se declare cumplido el convenio concursal, sin devengo de intereses.
La resolución se dicta tras la sentencia del Tribunal Supremo, que condenó al expresidente ejecutivo Manuel Fernández de Sousa a seis años de prisión por delito continuado de falsedad documental, falseamiento de cuentas y alzamiento de bienes. El alto tribunal estableció además que Fernández de Sousa y la empresa debían indemnizar con más de 125 millones de euros a los inversores perjudicados.
El magistrado señala que la calificación de estos créditos implica que no se someten a la disciplina del concurso ni pueden acogerse a posibles ventajas previstas en el proceso. Por esta razón deben asumir la reducción del 97,5% fijada en la propuesta básica del convenio de Pescanova. También indica que los importes no podrán satisfacerse durante la fase de cumplimiento del convenio y solo podrán abonarse una vez este haya sido declarado cumplido.
El juez estima así la demanda incidental planteada por Pescanova frente a Luxempart S.A., Corporación Económica Delta S.A., Disa Corporación Petrolífera S.A., Iberfomento S.L.U., Goartistry S.L. y Silicon Metals Holding LLC. La sentencia explica que los hechos que originaron los perjuicios reconocidos a estas entidades se produjeron antes de la declaración de concurso y que, por tanto, las indemnizaciones reclamadas son créditos anteriores y deben quedar integrados en el marco concursal.
La resolución no es firme y puede ser recurrida en apelación ante la Audiencia Provincial de Pontevedra.