El piso tipo de alquiler en la Región de Murcia registró en octubre de 2025 un precio medio de 8,40 euros por metro cuadrado, lo que supone un descenso mensual del -0,77%, el más acusado del país. Sin embargo, respecto a octubre de 2023, el incremento fue del 22,81%, según el informe mensual de precios de alquiler del portal pisos.com.
La Región de Murcia se situó como la séptima autonomía más asequible para los inquilinos, por detrás de comunidades como La Rioja (5,96 €/m²) o Castilla y León (6,45 €/m²). En el conjunto de España, el precio medio alcanzó los 13,94 euros/m², con una subida mensual del 1,09% y un aumento interanual del 17,24%.
Murcia capital, en zona intermedia
La ciudad de Murcia registró en octubre un precio medio de 9,63 €/m², lo que la coloca en una posición intermedia dentro del ranking nacional de rentas. En comparación con septiembre, el alquiler subió un 0,12%, mientras que frente a octubre de 2024, el incremento fue del 6,25%.
Contexto nacional
En el ámbito nacional, las regiones más caras para alquilar vivienda fueron Madrid (21,52 €/m²), Baleares (18,49 €/m²) y Cataluña (16,03 €/m²), mientras que las más baratas fueron La Rioja (5,96 €/m²), Castilla y León (6,45 €/m²) y Extremadura (6,63 €/m²).
El informe destaca que Asturias (+29,02%) lidera las subidas interanuales, mientras que la Región (-0,77%) registró el mayor ajuste mensual del país.
“La falta de oferta dispara los precios”
Según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, el mercado del alquiler sigue “muy tensionado” debido a la escasez de oferta. “La demanda sigue siendo eminentemente urbana, pero el stock disponible en zonas periféricas o mal conectadas no logra absorber ese exceso”, explica.
Font advierte que las medidas intervencionistas deben ir acompañadas de incentivos para los propietarios: “Imponer recargos sobre viviendas vacías puede empujar a los dueños a vender en lugar de alquilar, reduciendo aún más la oferta residencial”.
El experto insiste en que es necesario equilibrar la oferta y la demanda: “El parque de viviendas en zonas de alta demanda no crece al ritmo necesario, mientras que parte del existente permanece desocupado o infrautilizado”.
