La empresa propietaria de un camping de San Javier (Murcia) y su compañía aseguradora deberán indemnizar con 760 euros a una clienta, que resultó lesionada al abrirse la hamaca que utilizaba, caer al suelo y quedar aprisionado un dedo de la mano en la bisagra.
Así se dispone en la sentencia dictada por la Audiencia Provincial de Murcia, que revoca la dictada por el juzgado de Primera Instancia de San Javier, que en octubre pasado absolvió a las dos demandadas a las que ahora se condena.
Dice la Sala al estimar el recurso de la accidentada que “no es de esperar que una hamaca que está puesta en un establecimiento para su uso por los clientes colapse”.
Y añade en su resolución que el accidente se produjo cuando la demandante fue a sentarse en la hamaca y esta se abrió, sufriendo lesiones en un brazo y en un dedo de la mano.
El juzgado desestimó la reclamación al declarar que la perjudicada no había conseguido acreditar cuál había sido la causa del suceso.
Frente a esa argumentación, la sentencia de la Audiencia indica que hay que inferir que existió algún defecto en la hamaca en cuestión o una deficiente información sobre la forma de usarla.