El mercado inmobiliario español continuará experimentando tensiones en 2025, con subidas previstas tanto en los precios de compraventa como en los alquileres debido a la falta de oferta y una creciente demanda, según las previsiones del portal Idealista. «El déficit de vivienda es tan enorme que la tensión en los precios seguirá empujándolos hacia arriba», afirmó Francisco Iñareta, portavoz del portal.
La escasez de viviendas disponibles es atribuida a factores como la falta de previsión en el desarrollo de suelo, el ruido populista en torno a la vivienda, la burocracia, y la disminución de constructoras. Además, el descenso de los tipos de interés podría abaratar la financiación, incentivando a más familias a buscar vivienda en propiedad.
Se estima que los precios de compraventa cierren 2024 con un aumento del 10%, una tendencia que continuará en 2025, obligando a muchas familias a destinar un porcentaje creciente de sus ingresos a la vivienda, superando el límite recomendado del 30%. Aunque el número de compraventas en 2024 alcanzó las 600.000, un ligero incremento respecto al año anterior, no se espera un aumento significativo por la escasez de oferta.
En el mercado de alquiler, Idealista prevé un año crítico. La falta de viviendas disponibles, combinada con la legislación de control de precios, provocará una reducción drástica de la oferta en las zonas más reguladas, como Cataluña. Solo en Barcelona, el stock de alquiler se ha reducido un 75% en cinco años. «En estas zonas, la inseguridad percibida por los propietarios reduce aún más la oferta», apuntó Iñareta.
Aunque se espera un espejismo de aumento en la oferta a inicios de 2025, relacionado con la expiración de contratos de alquiler de cinco años firmados tras el cambio normativo en 2019, Idealista alerta que esta mejora será temporal y no solucionará el déficit estructural del mercado.